Me preguntaban el otro día, acerca de la regulación que debe cumplir todo cosmético en el Ecuador, para ser colocado en el mercado. Aprovecho este espacio, para comentar acerca de este tema y así responder, no sólo a esta persona, sino para quienes estén buscando respuesta a esta inquietud.

Los cosméticos tienen que ser seguros en su uso, es decir, que no generen efectos adversos para la salud de quien los está utilizando.  La calidad de un cosmético está íntimamente relacionada con el ámbito sanitario, de allí la necesidad imperiosa de que todo producto tiene que pasar por las agencias de regulación, control y vigilancia sanitaria del mundo.  No existe ningún país en el planeta, en el cual se dé una excepción para este requisito mandatorio.

No se puede hablar de cosméticos “artesanales”, o de ninguna otra índole, es decir, aquellos que se los puede elaborar dentro de casa o en algún lugar que no cuente, al menos con un permiso de funcionamiento por parte de la autoridad de control o en almacenes en los cuales, los cosméticos se venden con total apertura al público.  No porque se lo hace en un garaje, en la cocina de mi casa, en un laboratorio improvisado, o aún en un laboratorio que cuente con permiso, se puede elaborar cosméticos que estén exentos de pasar por una agencia sanitaria para que queden registrados por medio de un dossier, o un expediente en el cual, conste toda la “historia clínica” del producto y obtenga su código NSO. 

Si los cosméticos se los venden en un local comercial, a través de empresas de venta directa, en una peluquería, en algún punto o cadena de venta, obligatoriamente, debe obtener una NSO (Notificación Sanitaria Obligatoria), el cual es un código que consta en el etiquetado del producto y se lo reconoce, pues inicia con estas letras NSOC y demás información del código.  En la mayoría de países del mundo, estos códigos no constan en la etiqueta, pues se ha comprobado que están sujetos también a falsificaciones o alteraciones, lo cual puede confundir a los organismos de inspección, en el caso del control o inspección en el mercado; sin embargo, en Ecuador si se debe colocar todavía tal información en el rotulado de un producto cosmético. 

¿Cuál es el marco regulatorio de los cosméticos?

El marco regulatorio de los cosméticos en Ecuador, es la Decisión 833 de la Comunidad Andina o CAN, mismo que regula también al resto de países de esta Región: Colombia, Perú, Bolivia y Ecuador.  Al ser una norma comunitaria, es de obligatorio cumplimiento y, además, con carácter SUPRANACIONAL, lo cual implica que, como ley, es superior a toda norma, reglamento, decreto, ley que se pueda generar de manera local o nacional en cualquiera de estos cuatro países.  Ningún país de la CAN puede generar un reglamento nacional para regular o controlar a los cosméticos en cualquiera de sus ámbitos, pues se estaría contraponiéndose a la norma comunitaria que, por provenir de un acuerdo internacional, conforme con la Constitución de la República (jerarquía de las leyes Art 425 de la CR), es de superior jerarquía y de obligatoria aplicación.  Es por esto que, en el Ecuador, no existe ninguna otra ley que regule a los cosméticos, que no sea la Decisión 833 de la CAN, que, por cierto, es sumamente exigente, en cuanto a los requisitos que se deben cumplir, para que un cosmético sea colocado en el mercado, velando, sobre todo, por la seguridad sanitaria de estos productos, a favor de la protección de los consumidores.

Por lo tanto, los cosméticos en Ecuador están ampliamente regulados y vigilados por la norma andina, cuya entidad de control es el ARCSA (Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria).

La próxima vez que vaya a comprar un producto cosmético, le recomiendo que verifique que el mismo tenga su NSO registrado en ARCSA (APP Arcsa móvil);  si no tiene este código, será mucho mejor que no lo adquiera, pues puede constituir en un riesgo para su salud.  Mucho peor, adquirir productos por las redes sociales, de empresas o negocios que no estén registrados y controlados por los organismos de control del Ecuador, pues pueden constituir en un riesgo para su salud y la de su familia. 

Recuerde, además, que la industria de los cosméticos es una de las más innovadoras del mundo y no existe otra industria que esté tan cercana al ser humano, pues están presentes desde que nos levantamos cada mañana, hasta cuando nos despedimos del día en la noche.

¿Se ha puesto a pensar o a calcular, cuántos cosméticos utilizó hoy, antes de salir de casa?  Yo lo hice, y al menos 20 cosméticos pasaron por mi cuerpo, rostro, cabello, etc generando un ambiente de bienestar a mi alrededor:

Champú, acondicionador, pasta dental, jabón, desodorante, fragancia, entre otros.

Los cosméticos están presentes en nuestra vida diaria y ¡a buena hora!

María Fernanda León M.

Directora Ejecutiva

PROCOSMÉTICOS